bienvenida

¡Hola a todos!

Quiero darles la bienvenida a mi blog espero que les guste. Mi nombre es david tengo mucho que decir y poco tiempo para hacerlo, tanto que hechar afuera. Inspiración puede sobrar aveces, la imaginación es una herramienta fundamental y las palabras fluyen como un rio...

Cuantos temores no escondo, y cuantos más se alejan, mi mente es paresida a lo que se vive un dia de noviembre, mis ojos reflejan la luz de las blancas velas...sollozos, oraciones; mis labios nunca se abrirán para proclamar esas palabras. Deseos abundantes, corazón duro, virilidad débil. La suerte para mi no lo es todo, ni el dinero, ni el amor, ni la vida...ni nada.

Yace mi cuerpo inerte bajo el manto de un desierto suspiro inevitable, la luna se acerca para hablarme al oído, el sol se aleja para premiarme con la oscuridad. Y los colores penetrantes, como los que se ven un dia de noviembre. Ojos secos, arboles brillantes...viceversa.

Temores vanos, voces lúgubres, intentos inocentes; dicen que al final del camino está la luz.

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sábado, 18 de febrero de 2012

Ausente y distante


Ausente y distante,
te encuentro esta tarde;
con los sentimientos apagados
de una madrugada sin Luna.

Yo te miro, estas callada,
y los escalofríos me arrancan el pecho
y lo llevan a tus pies.

Cuento los pasos que no daré
para llegar a ti,
e invito al silencio a corromper
palabras que no te di.

Te veo, a solas, callada
y tiemblo;
y con más de diez cigarrillos
te pienso.

Callada, distante;
te observo,
con dos dibujos en mano,
que no voy a entregarte.

Sonríes a un lado,
yo estoy aparte;


¿Tu mundo y el mío
no han de encontrarse?

viernes, 17 de febrero de 2012

Distante y ausente


Distante y ausente,
también te sueño
y es mi agonía
no serte sincero.

Pero me dejas aparte,
y solo persigo tus labios
que me tienden trampas
con delirio y con tabaco,
con siluetas marchitas,
con atardeceres profanos.

Es el abismo de tu mirar,
los mares que no inventamos,
la solitaria risa,
besos cortos y lejanos,
caricias largas,
saciedad inoportuna
-locura que no nos damos-

Callada, distante;
te observo,
sonríes a un lado,
yo estoy aparte.


¿Tu mundo y el mío
no han de encontrarse?










Me siento a tu lado y hablamos el silencio que se ha hecho tan común.
En un sueño dijiste: "te eché de menos" y al despertar
vibraron mis entrañas.
yo te idolatro,
pero tu no me amas.

domingo, 12 de febrero de 2012

Los enamorados


Los enamorados; son, seguramente,
bestias misteriosas, que ahogan su risa
con vino, con besos y con Luna.
Seguramente son esqueletos, que bailan
a la luz del llanto, cubiertos de noche y celo;
mueren y renacen, desafiando al tiempo.

Los enamorados son un intento de lluvia,
porque demoran mucho, y son dos nubes
silenciosas, mal teñidas de ensueño.
Han de ser, también, dos rojos corazones
que no palpitan, pajarillos sin vuelo,
ojos ciegos, oídos sordos, o pinceles que no pintan.

Seguramente, se meten en agujeros, para cubrirse del frío,
y usan los brazos para entregarse cariños,
sus insensibles miradas son, a veces, lobos feroces,
serpientes enredadas, conejos veloces.
Son la voz de un fantasma, atrapado en sus callejones,
son la muerte; los enamorados,
y estoy seguro de que a cada rato mienten.

Sus frágiles manos, envenenadas de amor,
recorren cada esquina de alguna inexistente habitación.
Los enamorados son flores deshechas y también
son un jardín, son dos árboles vecinos, y el aroma de un abril.

Son dos trazos de colores que recogen pétalos,
son el agua turbia de un río, son pedazos de viento
sin perfume, son el humor de las alucinaciones.
Son, al fin, los enamorados; un frasco de deseos,
o quizá dos lamentos desollados.

jueves, 2 de febrero de 2012

Viuda



Flores sobre mi tumba, hermosas...me acarician y las plegarias humillantes pintan de verguenza mis pies.
Marchitas, ya estan marchitas esas manos que pudieron acariciar; que pudieron hacer vibrar.
Estan muertos, esos ojos del color oscuro, tan sobrenaturales.
... Estamos juntos, nos abraza la muerte, así como una vez nos separó la vida y estubimos lejos y nuestras ramas deseaban tocarse, nuestras cortesas unirse, nuestras hojas posarse una sobre otra.
Y estubimos ebrios en el espacio, y cruzamos el cielo envueltos en llamas. Pero me engañaste con la muerte, y quebraste tus promesas, huiste tan lejos de mis iluciones, tan lejos de mi.
Soñé con este día, con este mes, con este año...soñaba siempre con volver a quemar tus cigarrillos, y reirnos del fuego, volar y volar de nuevo pero estubiste ausente y tu ausencia me mató...es por eso que he regresado a tu lado, estaremos aqui en las cavernas del infierno, hasta que se derritan los pecados, hasta que nos salgan alas y nos colapsemos de euforia otra vez, apagando las cenizas incendiadas con nuestras lagrimas, somos indecentes espiritus, somos almas sin perdón...y estamos juntos.

Ojalá



Ojalá fuera la noche
embriagando sus mejillas
ojalá fuera la solución
a sus enredos y pesadillas.

Y, fuera yo,
su tabaco y su esperanza,
la poca fe, lo ausente
y la alabanza.

Ojalá fuera un poco de vino,
para vivir en su embriaguez,
ojalá se apagaran las luces
y se perdiera en mi otra vez.

Y, fuera yo,
quien da muerte a su agonía,
quien da muerte a su pena...
el dolor, la peste, la apatía.

Ojalá en la lluvia
estuvieran escritas cenizas,
discretas emociones,
celos, y risas.

Y, fuera yo,
dueño del viento,
compadeciendo las horas,
caminando lento.

Ojalá sienta algo,
algún día de brisa,
algún día de estragos,
de siluetas y poca prisa.

miércoles, 1 de febrero de 2012

I

El tiempo del que disponemos
es muy corto,
deberíamos aprovecharlo.
Deberías soltar la risa,
para que vuele a carcajadas
por el aire de la ciudad.
Deberías abrazar cada árbol,
con fervor marchito
de primavera...

Yo abriré los brazos
fingiendo ramas,
y soltaré suspiros
para que sean hojas,
y tal vez así
te acercas
y aprovechamos el tiempo
juntos...

II

Busquemos las sonrisas de febrero,
los silencios y las brisas.
Soltemos los cabellos decolorados,
sin aroma y sin vida;
el tiempo nos envidia,
las horas se hacen mudas
y galopan como ríos.

En el cielo se consumen los ocasos
así como se consumen los cigarrillos.
El frío nos vela, las luces duermen
y las frágiles ramas cantando
placeres vanos y lejanos.
Las voces dando pasos
y nuestro silencio escondido.
Las horas se hacen mudas
y galopan como ríos.

III

Saltamos, juntos, por el valle,
nuestros rostros serios,
se sonrieron.

Estuve aquí y allá
a su lado...
pero las miradas no se han conocido;
frunciendo el ceño
y apaciguándolo, después;
como apagando a los furiosos volcanes.

En la soledad del valle, saltamos juntos,
sus manos de muerte
pintando el viento,
y llovía sobre los ojos.

...Era un dolor de invierno
que me persiguió hasta el hastío.
Soñé la nieve y el rocío...
estaba solo, tu ausente

...Era una dulce amargura.